Para tomar impulso y llegas más alto. |
Por eso, me callo. Por eso trato de elegir bien lo que digo y lo que me guardo.
En mi mundo, según mi diccionario decir algo en voz alta es darle una entidad a algo que no quiero que sea verdad. Guardarlo adentro mío significa restarle importancia, minimizarlo. Que se quede sin ver al sol es como actuar a que es mentira. Si todo adentro mío quiere gritar dolor, me coso la boca con agujas de plata e hilo de oro. En cambio, sonrío; busco alguna cosa buena y eso sí, lo grito.
No es lo mismo que mentir. Es mi mecanismo de defensa. ¿De qué? De mí misma. Así, es como defiendo y escondo las espinas de la rosa.
Hacer esto es preferir el optimismo antes que a la queja. Una sonrisa en vez de un semblante preocupado. Es poner prioridades. Mi prioridad fue, es y será lo bueno, la luz.